A finales del siglo XIX un joven poeta japonés se ejercita en el arte del haiku. Para perfeccionarse decide viajar al encuentro de un anciano pintor que se ha quedado ciego. Entre ellos se establece una relación hecha de respeto y silencios, en la que la imagen obsesiva de una mujer desaparecida en la nieve reunirá a los dos hombres. Una hermosa fábula intemporal sobre la vida, la poesía, el amor y la muerte.

En una lengua concisa y blanca, Maxence cincela una historia en la que la belleza y el amor tienen el mismo fulgor del haiku. También encontramos aquí el retrato de un Japón refinado, en el que, entre violencia y dulzura, la tradición es enfrentarse a las fuerzas de la vida.

«Es menos una novela que un cuento, un cuento magnífico, ya que tiene la belleza, la redondez, la extrañeza de una bola de nieve; es una metáfora que utilizo adrede. ¡Me enloquece ese cuento! Es una bellísima meditación sobre el amor, sobre el funambulismo y sobre la pintura» (Bernard Pivot, Bouillon de culture).

«Un relato hermoso, maravillosamente breve y muy eficaz» (Le Magazine Littéraire).

«En esta forma de mezclar onirismo y realismo se advierte la innegable influencia de Seda de Baricco» (La Marseillaise).

«Bellísimo relato de iniciación... Una novela sobria, de una misteriosa limpidez a semejanza de la historia que la inspira» (Le Figaro Littéraire).

«Una delicada historia de arte, de poesía, de amor, de pasión en el Japón de finales del siglo XIX, entre samurais, maestros zen y escritores de haiku» (Guido Michelone, Notizia Oggi).

«Una fábula ligera y etérea como un haiku» (La Repubblica).