En El diario de Edith, Patricia Highsmith dibuja la trayectoria de un desmoronamiento personal que va cobrando impulso para acabar precipitándose de forma vertiginosa en medio de la trivial normalidad.

En una pequeña casita de Pennsylvania, que comparte con el babeante tío George y su malvado hijo Cliffie, Edith observa cómo la realidad de cada día la va asfixiando más y más cada vez. Lentamente, y de manera inevitable, se refugia en su diario, donde construye la fantasía perfecta de una vida completamente distinta... y el desenlace es más sutil, más intenso, más terrorífico que si se tratara de un simple asesinato.

«Highsmith investiga el corazón de su heroína con una ferocidad controlada y una firmeza que iluminan cada página de su novela» (The Times).

«Más original, divertida, inteligentemente escrita y conmovedora que ninguna otra novela que haya leído desde que empecé a hacer críticas» (Auberon Waugh, Evening Standard).

«Patricia Highsmith crea un universo personal de monstruos de encarnadura "normal" con el que identifica el mundo que conoce, y dominándolo a placer, sometiéndolo a su innegable capacidad de recrearlo y a la vez subvertirlo, acentuando la densidad agobiante de la atmósfera, debatiéndose en ella como una más de sus criaturas y manipulándolas según sus deseos, desafía el poder de la realidad y se burla de su rostro entre grosero y horrible» (Robert Saladrigas, La Vanguardia).