ISBN | 978-84-339-0537-6 |
EAN | 9788433905376 |
PVP CON IVA | 25.90 € |
NOTA DE LA EDITORIAL | No disponible. La editorial indica que está descatalogado o agotado indefinidamente |
NÚM. DE PÁGINAS | 546 |
COLECCIÓN | Argumentos |
CÓDIGO | A 187 |
TRADUCCIÓN | Nora Castelli |
PUBLICACIÓN | 07/10/1996 |
Cultura e Imperialismo
COLECCIÓN:Argumentos
Jamás en toda la historia el fenómeno del imperialismo tuvo las dimensiones que alcanzara en el siglo XIX y principios del XX. Roma, Bizancio o España en su momento de máximo esplendor, no pueden compararse con Francia, Estados Unidos o Gran Bretaña. Con todo, y a pesar de que este fenómeno ha afectado profundamente la vida en las grandes capitales imperiales y en sus colonias, su influencia en los productos culturales de Occidente nunca ha sido suficientemente estudiada. Edward W. Said, mediante un análisis sutil y brillante de algunos de estos productos más emblemáticos –la Aida, de Verdi, El corazón de las tinieblas, de Conrad, El extranjero, de Camus– ilumina la cooperación entre cultura y política que ha producido –a sabiendas o a ciegas– un sistema de dominación que implicaba mucho más que cañones y soldados, una soberanía que se extendía sobre formas e imágenes y comprometía la imaginación de dominadores y dominados. El resultado fue una «visión consolidada» que afirmaba no sólo el derecho de Occidente a gobernar, sino también su obligación. Said despliega, según sus propias palabras, las diferentes etapas del «contrapunto» entre metrópolis y periferias, y construye una obra indispensable para la comprensión del proceso histórico y cultural más complejo y abarcador de la modernidad.
«Obra imprescindible» (José María Ridao, El País).
«La originalidad y la eficacia de este estudio se basan en el método. Said trabaja sobre las obras individuales, 'leyéndolas primero como grandiosos productos de la imaginación creadora e interpretativa, y luego mostrándolas dentro de la relación entre cultura e imperio» (Elvira Huelbes, El Mundo).
«Pivote entre dos mundos, sólo Said ha sido capaz de advertir que la apacible rutina de Mansfield Park, la mansión en la novela de Jane Austen, se mantiene con el trabajo esclavo de una isla del Caribe. Sin imperio, proclama Said, no existiría la novela clásica europea tal como la conocemos» (Terry Eagleton, The Guardian).
«La crítica literaria que intenta tender puentes entre el arte y la política tiene que aprender mucho, si no todo, de este impresionante diálogo de Said consigo mismo» (Camille Paglia, The Washington Post).
«Con su pasión y su exquisita erudición la investigación de Edward W. Said acerca de la “tipografía cultural” del imperialismo ofrece una nueva visión sobre esta estructura central de la sociedad mundial» (Noam Chomsky).
«Nadie que se dedique a investigar las relaciones entre el Occidente metropolitano y las regiones descolonizadas del planeta puede ignorar esta obra de Said» (Michael Gorra, The New York Times Book Review).
ISBN | 978-84-339-0537-6 |
EAN | 9788433905376 |
PVP CON IVA | 25.90 € |
NOTA DE LA EDITORIAL | No disponible. La editorial indica que está descatalogado o agotado indefinidamente |
NÚM. DE PÁGINAS | 546 |
COLECCIÓN | Argumentos |
CÓDIGO | A 187 |
TRADUCCIÓN | Nora Castelli |
PUBLICACIÓN | 07/10/1996 |
Edward S. Said, palestino de origen, protestante por religión (su familia pertenecía a la minoría cristiana del Líbano, su país natal) y norteamericano por adopción, es profesor de literatura comparada en la Universidad de Columbia. Pero es mucho más. Especialista en Joseph Conrad, se dio a conocer a finales de los años setenta con The World, the Text and the Critic, donde polemizaba con las posturas estructuralistas y formalistas en la crítica literaria. Políglota, mandarín de los estudios culturales, inventor años más tarde de una nueva disciplina con su extraordinario ensayo Orientalismo, en el que sometió a examen las representaciones e imágenes occidentales del mundo árabe, es defensor de la causa palestina en Estados Unidos (miembro del Consejo Nacional Palestino desde 1977 a 1991), musicólogo, polemista feroz y agudísimo lector, como demuestra en sus maravillosas y heterodoxas interpretaciones, en esta obra, de Mansfield Park de Jane Auster, de Kim de Kipling o de Aida de Verdi.