Los relatos agrupados en Héroes y vecinos constituyen fragmentos de esa materia real que es la cotidianeidad, tratados por un observador irónico y agudísimo. Pocos temas escapan a su peculiar disección: la relación con los hijos, los vínculos de vecindad, la subordinación y contradicciones del empleo, el adulterio, el trato con la propia edad.

Una escritura introspectiva y brillante, donde nunca falta el sentido del humor, acompaña el desarrollo de más de cuarenta instantáneas sobre muy diversas situaciones y en las que posiblemente reconocerá el lector secuencias de sus conflictos íntimos. La perplejidad, unas veces, en situaciones que comprometen la autoestima, el temor otras, o el sentido de culpa y desamparo caracterizan el diseño del personaje que protagoniza la mayor parte de los argumentos. Un personaje que sobrevive a su circunstancial debilidad, haciendo de la duda una obsesión de conocimiento, donde se incluye como objeto y como sujeto a un tiempo. 

En El País Semanal se publicaron por primera vez estos relatos a lo largo de un año y medio, con una excelente acogida por parte de los lectores. Reunidos ahora en un libro, se estructuran formando un mundo en cuya coherencia interna destaca la perspicacia para haber ido apresando intervalos de lo real y en cuya tesitura casi fulgurante se decide tantas veces la felicidad o la desdicha de sentirse vivo.

Vicente Verdú, cuyos numerosos artículos y libros de ensayo sobre la vida cotidiana han demostrado sus condiciones de excelente escritor, se manifiesta ahora como un preciso y originalísimo narrador en el panorama de la literatura española y comparable a los mejores especialistas de la llamada «ficción súbita» anglosajona.