Agustí Segarra desarrolla su análisis empezando con una Introducción, «El anarquismo y lo intelectual», donde sentará las bases para afrontar los capítulos de su trabajo: «El eje libertario», «Sociedad y economía», «Organización y revolución» y «Los condicionamientos de la moral». Como todo trabajo de análisis, cuenta con unas conclusiones, entre las cuales podemos destacar:

«El anarquismo español del siglo XIX, del que Urales y Mella son dos idóneos representantes, peca en exceso de contradicción entre sus postulados teóricos, de corte racionalista impregnado del «progresismo» característico de una política de la época, y su decidida y en todo momento consecuente y fiel tendencia a todo lo popular y espontáneo. Sólo que, veáse aquí una muestra de tal incongruencia, en lo que respecta precisamente a la libertad y a espontaneísmo la cuestión de las minorías nacionales y culturales llevó siempre la peor parte, por cuanto tachándolas a priori de racionalismo burgués, no podía nunca apreciarse lo que de auténticamente popular contenía.

Pero incluso con su falta de rigor en el análisis de la sociedad y sus deficiencias, en la formulación de un esquema económico aceptable, es decir considerándolo únicamente como lo que realmente fue —una ética comprometida en la lucha contra la alienación, y no una táctica política para la sustitución del Estado— el anarquismo que representan Mella y Urales tuvo el atractivo suficiente para seguir ganando —durante años— la adhesión de quienes deseaban un cambio total en los valores que regían la sociedad. Y todavía hoy su legado de antiautoritarismo y libertad sigue siendo contribución importante a todo movimiento libertario que se proponga la alternativa a las estructuras vigentes.»

El libro también contiene una bibliografía tanto de Ricardo Mella como de Federico Urales.

Serie: Documentos.