ISBN | 978-84-339-2470-4 |
EAN | 9788433924704 |
PVP CON IVA | 11.7 € |
NÚM. DE PÁGINAS | 232 |
COLECCIÓN | Narrativas hispánicas |
CÓDIGO | NH 299 |
PUBLICACIÓN | 01/01/2001 |
Labia
COLECCIÓN:Narrativas hispánicas
«Labia» es -según el diccionario de María Moliner-«la habilidad para decir cosas agradables o convencer con palabras.» O dicho de otra manera: el arte de relatar. Más que una narración lineal, Labia es un libro de voces. Una polifonía de voces que cuentan historias, a través de las que el protagonista de este texto, un muchacho, conocerá la existencia de una pequeña papelería de barrio en el Madrid de los años 70, dirigida por tres hermanas «listísimas», una de las cuales, «la hermana Gallardo de en medio», le enseña caligrafía y le cuenta una leyenda medieval protagonizada por el emperador Carlomagno, la princesa Mármara y un libro mítico; asistirá a las clases particulares de dibujo y pintura, impartidas en su propio domicilio, del profesor Linaza, su ama de llaves y un perro arrinconado que parecía -o es- una oveja disecada; sabrá de los apuros que pasa un escultor en París, víctima de una conspiración de boy scouts, y de las circunstancias que rodean la biografía del diminuto Óscar, que no podía crecer.
Todo ello envuelto en música, en ecos, en una voz multiplicada que, además, de cuando en cuando se pierde, relega a otra voz el curso de la narración, se recupera y, de nuevo, le gusta extraviarse, siendo siempre la misma voz y siempre otra, siempre modificándose. Una voz con la que se aprende a mirar y que recompone el mundo, la memoria, las cosas, en una atmósfera de melancolía alegre, de alegre tristeza.
Narrativa de lo mínimo, Labia casi no tiene suelo, está hecha de una materia aérea y maravillosa que sólo es posible gracias a una poética de la mirada, a un ajuste hipnótico entre palabra y objeto que desemboca en una defensa de la creación, la escritura y el arte como formas de salvación y reconstrucción del mundo. Estamos ante un libro emocionante que consagra definitivamente a Eloy Tizón como a una de las miradas más personales y sugerentes del panorama literario actual en lengua española.
ISBN | 978-84-339-2470-4 |
EAN | 9788433924704 |
PVP CON IVA | 11.7 € |
NÚM. DE PÁGINAS | 232 |
COLECCIÓN | Narrativas hispánicas |
CÓDIGO | NH 299 |
PUBLICACIÓN | 01/01/2001 |
Eloy Tizón (Madrid, 1964) ha publicado en Anagrama Velocidad de los jardines (1992), elegido por El País como «uno de los 100 libros españoles más significativos de los últimos 25 años» y seleccionado por la revista Quimera entre «los mejores libros de cuentos de la literatura española del siglo XX.» También es autor de las novelas Seda salvaje (1995, finalista del Premio Herralde), Labia (2001), La voz cantante (2004) y Parpadeos (2006), todas ellas recibidas con una entusiasta acogida crítica: «Desde el principio, Eloy Tizón parecía destinado a aceptar los mayores desafíos. Un ejercicio de metaliteratura de primera magnitud. Y sigo creyendo que dada la brillantez de este excepcional escritor, debería verse mejor recompensado por la lectura masiva que su calidad merece» (Rafael Conte, El País); «Prosa elegante y concisa, inteligente sin exhibicionismo, provocadora sin estridencias. Una escritura corrosiva, pero también angélica» (J. A. Masoliver Ródenas, La Vanguardia); «Eloy Tizón cuenta con maestría, con sobriedad ejemplar, incluso con modélico laconismo, y con prosa inventiva, nunca tópica ni plana, que no se deroga en vanas ornamentaciones; es dueño siempre de la narración, pues controla con sabiduría sus tempos, sus ritmos, evita la monotonía, sabe ser divertido, evita el patetismo, orilla la grandilocuencia, destila suave humor. Ratifica con La voz cantante sus condiciones de excelente, riguroso narrador, que a su edad puede dar mucho de sí» (Miguel García-Posada, ABC); «La voz cantante es una bellísima novela, una lección de literatura con mayúsculas iluminada a cada paso por la hoguera de la imaginación lírica. Y un texto, sobre todo, que sitúa a Eloy Tizón como uno de los pocos narradores del panorama actual dispuestos a jugar hasta el final la baza del inconformismo, la experimentación y el compromiso con la literatura» (Ángel Zapata, Muface).
Foto © Robert Ramos