La publicación de Malcolm, la novela más famosa de James Purdy, causó una conmoción en el establishment literario norteamericano por su ingenio, talento y radical originalidad. Tennessee Williams afirmó: «Purdy puede desazonar e irritar a los partidarios de que la narrativa discurra por senderos trillados, pero estoy seguro de que encantará al lector que valora una nueva expresión de nuevos sentimientos y nuevas experiencias en nuestros muy nuevos tiempos».

Malcolm es una fábula, de una rara poesía, acerca de un joven hermoso e inocente, que esera interminablemente el regreso de su padre desaparecido y cuya vida toma un rumbo imprevisible a raíz de su encuentro con Mr. Cox, un afamado astrólogo.

Cox introduce a Malcolm en un extravagante núcleo de amigos, entre los que figuran un empresario de pompas fúnebres, un pintor enano, una gran dama, un multimillonario, una reina del jazz, un ex-presidiario, un artista del tatuaje, un motorista y, por último, una célebre cantante cuyos excesos alcohólicos conducen al protagonista más allá del éxtasis. Todos ellos acosan al joven Malcolm, que es arrastrado a un maelstrom de deseo, como una oveja arrojada a los leones.

El universo de Purdy parece alucinatorio ya que invierte el usual orden de las cosas: así como en la antigua novela picaresca el inocente adquiere experiencia en contacto con el mundo, el joven Malcolm es una experiencia para quienes le conocen, mientras él mismo es objeto de un vertiginoso deterioro.

«Purdy crea un vacío en el interior del ancho mundo, asemejándose así a Kafka, y luego excava, como si fuera una cultura difunta, como Pompeya» (Frederick R. Karl).

«Uno de los genios más originales de nuestra época. Su comprensión de las crueldades y los horrores diabólicos que acechan bajo la piel de las convenciones es tan sorprendente como su comprensión de la ternura y de la piedad» (John Cowper Powys).

«El más prodigiosamente divertido libro para atravesar estos difíciles y jodidos tiempos» (Dorothy Parker).